Montenegro sigue siendo el eslabón más débil en los Balcanes:
mientras incluso Kosovo alcanza un acuerdo histórico con Serbia, que
abre la puerta a una nueva posibilidad de desarrollo democrático,
Podgorica no se mueve un ápice. En efecto, el inmutable marco político
del atemporal Milo Djukanovic que mueve los hilos del país, aporta el
caldo de cultivo ideal para el crimen organizado. Un reciente informe de
Europol, aún no publicado en su totalidad, ha conseguido ser portada del
montenegrino Dvene novine: "el centro más importante para el
blanqueo de dinero," sería Montenegro de acuerdo con Europol. "El dinero
adquirido ilegalmente se inyecta en la economía legal, a través de los
líderes políticos y los magnates rusos cuyas empresas llevan años en el
centro de investigación de la policía europea", puede leerse en el los
titulares.
El informe señala que Montenegro está en la ruta del tráfico de drogas, en el centro de la "ruta de los Balcanes", que conduce la heroína de Afganistán a Europa. "Montenegro es un destino interesante para el tráfico de mercancías no sólo por la poca vigilancia, sino también por la posibilidad de corromper a la policía", señala el informe, añadiendo que los criminales están utilizando prácticamente puertos inalterados en la costa del Adriático para el tráfico de drogas.
Las autoridades de Montenegro han reaccionado diciendo que el informe de Europol "no es oficial" y que el comunicado "no refleja la situación real en el país." Una situación ésta de la delincuencia que necesita de omertà y silencio para prosperar y que da el pulso de un país que, detrás de las máscaras de la cooperación con Europa, es el centro del tráfico de ilícitos desde hace veinte años, en parte a causa de connivencias políticas en las que Milo Djukanovic se ve directamente involucrado.
Enlaces de interés:
Corruption in Montenegro: Bribery as experienced by the population
Montenegrin police probes Russians suspected of money laundering